Jesus sana el hombre sordo




The Baseball Priest show

Summary: El Señor no quiere que permanezcamos en el dolor de nuestras heridas. Cada vez que NO llevamos nuestras heridas a Jesús para que se curen, las heridas se llenan de ira y resentimiento y nos sentimos encarcelados o esclavos. Sin embargo, cuando ofrecemos estas heridas a Jesús para sanarse, encontramos alivio, alegría, libertad y paz.